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Promoting a change in the NICs 8180 and 8190

Reading an article for peer review (summarized in this poster) i thought about the desirability of "relabel" the NICs 8180 and 8190 because there are already many more ways for patients to consult or be followed by his nurse.

Right now there are platforms on which professionals and patients share space and I have no doubt about the future use of audiovisual media in the same way that already exist gadgets for the detailed monitoring of physiological parameters and other at home.

The fundamental question is: are ready the taxonomic tools for the future 2.0? I do not know where to direct this concern is more I do not know if it's doing right now, just hope it does not come too late.

La perspectiva

Cada vez escribo menos, lo sé; lo vengo diciendo desde hace tiempo se ha incorporado gente que escribe mucho mejor y más focalizado y prefiero participar en los comentarios y compartir donde creo que puedo aportar y aprender.

Pero no deja de sorprenderme que en los temas de seguridad del paciente personas a las que tengo por eminencias en su campo concreto cometan fallos tan llamativos como el pensar que los aspectos de seguridad tienen "perspectivas" según la profesión de cada uno.

Afirmo: Un Evento Adverso (EA) sólo tiene una perspectiva; la de la persona dañada y la de la(s) segunda(s) víctima(s). Pensar de otro modo nos lleva al razonamiento de que existen "culpables" y no fallos y de ahí a la regañina como mecanismo de solución cuando no a la persecución y el escarnio acciones que, a poco que se lea, no son las recomendadas ni las efectivas a medio y largo plazo para evitar que los incidentes y EAs se repitan.
Reason "de enfermeras" un error de perspectiva.

Porque aplicando ese esquema se podría llegar a pensar que sólo la enfermería puede evitar los EAs y no es así ni mucho menos; es más creo que quien tiene el principal papel en la seguridad del paciente tal y como están ahora las cosas es EL PROPIO PACIENTE; y léase bien, digo el principal, no el único y bien sé que es un papel  poco o nada potenciado ni explorado, pero que va a ser fundamental dada la complejidad que está tomando la atención sanitaria y las implicaciones que tendrá en un futuro próximo que se haga realidad la quimera de la Historia Clínica Única (electrónica).

Así pues como tuve ocasión de repasar ayer la seguridad del paciente es un eje transversal en todos los procesos y áreas de la atención sanitaria y en ella estamos implicados por igual todos los profesionales y, principalmente, el propio paciente aunque a nuestra "cultura de seguridad" aún le falte bastante camino antes de crear herramientas y foros compartidos entre unos y otros deberíamos empezar por realizar un trabajo conjunto todos los integrantes del equipo asumiendo que los fallos del sistema que hoy provocan un fallo que afecta a un profesional mañana van a afectar a otro y SIEMPRE al paciente.


Curtando na perna boa

Temos unha embolia, unha putrefacción no sistema das finanzas. Marchoulle o sangue, ten mala circulación ou cecais é que non hai sangue da de verdade: secáronlla e levarolla lonxe tras anos de avaricia sen límite.

 Os cartos debidos non existen, non teñen respaldo de obxectos de verdade, de bens, de traballo... o sistema de ficción queda ó descuberto.

Así pois temos un sistema socioeconómico tolleito, coxo, lisiado e pretendemos curalo sacando o sangue da perna que nos mantén en pé, da que nos prepara para o futuro, a que nos axuda a sentirmonos ben: pretendemos curar curtando na perna boa.

Esta sería unha boa argumentación por si soa pero non hai que se enganar SI hai cousas que facer para que a "perna boa" siga a ser o que queremos; cheas de abusos e faltas de responsabilidade que afloran neste intre de presión desmanteladora. Ningún aforro é "chocolate do loro" cando do que se está a falar é de deixar de prestar atención efectiva.

Sego a botar en falta propostas do 5%, propostas para evitar abusos, denúncias de dobre xogo, exemplo. Hai que ter fachenda para falar de independencia na prescripción/adquisición e non das facturas pagadas por outros no nome dun.

Traballar 35 horas semanais cos usuarios finais do servizo que se presta así dito non semella un tema de liorta de clases senon algo razoable para unha enfermeira é o normal para outra xente co mesmo nivel de titulación non e vai custar que se entenda e mais cando as noites e as fins de semana non son iguais para tod@s.

Persoalmente coido que hai que seren mais imaxinativos no xeito de comunicar o perigo que sufre o sistema público; facendo folga prolongase a imaxe dun sistema de privilexio e de pouco traballo. Tamén nesto se pode ser innovador e disruptivo.

A la sombra de una factura...

Hoy, mañana, ayer... hace 13 años se despliega uno de los temas reiterativos de la macrogestión sanitaria "la factura indicativa"; un mecanismo que en su razonamiento directo pretende hacer conscientes a los usuarios del coste de los servicios que recibieron y que, previamente de un modo indirecto se han echo acreedores a ellos... o no.

Lo de hace 13 años no lo digo por decir; a nosotros nos dieron una "factura indicativa" por la atención al nacimiento de nuestro segundo hijo; 200000 pts. lo que sirvió para que una de las abuelas dijese que era un mes de sueldo nuestro y poco más.

No voy a entrar en la sombra de la factura; en esos pensamientos colaterales que algunos creen que están detrás de este empeño reiterativo... o si, pero después. Primero vamos a fondo con el tema. Como se trata de algo "indicativo" pues en realidad de factura tiene poco (salvo que se hicieran cambios y se pusiera un Watson a trabajar en ello). Yo recibo un servicio de otro tipo y, para cumplir la legalidad, la factura debe detallar los costes en los que dicho servicio ha incurrido... costes de los que, en sanidad, dudo mucho que se tenga el detalle analítico cierto sino más bien una aproximación estandarizada al "producto" facturado (los códigos CIE-9) pero, en ningún caso, (hasta donde yo sé) se vincula un episodio a su gasto real.

Y os lo cuenta alguien que arrancaba pegatinas de códigos de barras de cada jeringa, aguja, paquete de gasas etc. que se usaba y lo pegaba en un folio con la identificación del paciente que estaba atendiendo... Cuanta información... qué poco rendimiento se le sacaba... creo.

Pero el tema es que si en serio se quiere sacar un rendimiento a que los usuarios conozcan lo que les cuesta (porque ya lo pagan) el servicio que se les presta ¿no sería mejor hacerles saber lo que cuesta una consulta, una programación quirúrgica, una prueba concreta etc? cada una de esas oportunidades de las que disfrutan pero que algunos malgastan... y por ahí si veo "retorno" del esfuerzo de facturar en la sanidad pública. Cobrarle a quien no justifique su ausencia sin previo aviso a esas citas pues 'roba' la oportunidad a otra persona.

En cambio lo de la factura propuesta... ¿que va a ocurrir cuando los ciudadanos crean saber que una catarata operada en la sanidad pública cuesta 50% más que en la privada (es una suposición)? ¿entenderá qué factores estructurales inherentes hay en ese sobrecoste? ¿se molestará alguien en decirlo?... ¿y qué coste tiene esto? 'escaso' 'poco' etc... pero ¿y su coste-efectividad? ¿se va a medir de un modo transparente?

En fin, quedamos a la sombra... que hace calor.

Coincidencias y discrepancias

Ayer, casualmente, un medio de comunicación centró varios puntos de las conversaciones en mi TL... y eso empieza a ser raro. Cuando aún resuenan los vientos y las calmas de lo publicado en Diario Médico estas dos pinceladas muestran unas preocupaciones bien señaladas pero, otra vez; carentes de enfoque de equipo.

La infección de la herida quirúrgica como otros eventos adversos derivados de la atención sanitaria es, por prevenible, nada tolerable y aún pareciendo un objetivo irreal marcarse "0 infecciones" como meta es y ha sido siempre el objetivo de todo el equipo de personas que trabajan al rededor de la atención sanitaria.

Los cirujanos Culebras, Cainzos y Mayol señalan las claves del estado actual del problema, muestran; como no puede ser menos, su conocimiento sobre el mismo y señalan alguna de las espectativas abiertas como la Fast Track pero el artículo (porque por lo menos de Julio me consta que no) omite al equipo, a la inteligencia colectiva; justo esa que además de conocer es capaz de improvisar en beneficio del paciente y de innovar mejorando los procesos y sus resultados. Sin inteligencia colectiva una iniciativa como la señalada tardará muchos más años en mostrar su potencial.

Respecto al objeto del trabajo en sanidad y la visión que se deduce de la viñeta señalada he de apuntar que sería un error caer en cualquiera de los dos extremos pues si "sólo hacemos sanidad" con cada paciente estaremos robando a los siguientes pacientes la oportunidad de ser atendidos no ya IGUAL sino simplemente atendidos; pero si centramos nuestro foco en "sólo gestionar el gasto" dejaremos sin opciones a los profesionales.

No hace mucho publiqué en este blog el resultado del avance de un estudio que no sé si nunca realizaré sobre cuanto saben los profesionales sobre el coste de los recursos que utilizan y cómo reciben y les gustaría recibir esa información... creo que la responsabilidad en la atención sanitaria se ha de repartir entre las personas que tenemos 'delante' cada día y las que 'están por venir' y para ello deberíamos conocer lo que cuestan las opciones que usamos y lo que costamos nosotros mismos pues, por si alguien lo ignorase, el 60% del gasto (la A) en sanidad somos las personas aunque, por suerte, ese enfoque va teniendo su antítesis en el momento en el que sepamos darnos la capacidad responsable de participar en la toma de decisiones para la mejora del objetivo común. En ese momento la partida de personal dejará de ser un 'gasto' para ser una inversión; la más productiva que pueda tener el SNS.

La relación fotosensible

Cuando caí en cuenta ya había pasado algo de tiempo; hasta ese momento siempre pensé que se trataba de una cuestión de priorización, de acompasar esfuerzos, de obtener un mejor rendimiento de las horas que se pasan en una guardia...

Pero ahora tengo mis dudas.

Hace casi dos décadas participé en la apertura de un servicio de urgencias en un centro nuevo con un modelo de gestión privado; dado el volumen inicial de trabajo previsto los médicos realizaban las radiografías y nosotr@s, las enfermer@s realizabamos el trabajo de admisión administrativa y, como consecuencia de ello, realizábamos un primer estadiaje de los pacientes atendidos. Un auténtico triaje en cuestión de 1' o menos decidiamos en cual de los 3 tipos de espacios de atención disponible y con qué prioridad se atendería al paciente.

Según la situación clínica y los antecedentes del paciente no solo se le colocaba en el espacio de atención en disposición de ser explorado (desprendido de la ropa que fuese menester y cubierto con esos camisones 'no tapa nada'), con las constantes vitales tomadas, con una mínima entrevista clínica reflejada en nuestro registro sino que, además; insisto, según la situación clínica y los antecedentes, con una analítica extraída, un ECG realizado... una atención protocolizada.

Era un equipo bastante bien integrado y, en general, no existian grandes roces al respecto de la actuación de unos y otros. Muchas veces se estaba empezando a pasar la medicación antes de que concluyera la entrevista clínica del médico y, en algunos casos, algun@s (los que tenemos el correspondiente curso) realizabamos las radiografías antes de que el médico viese al paciente.

En aquellos años sólo una persona insistía en que la enfermería actuase como si fuese "personal técnico" esperando 'en posición de firmes' (le decíamos con sorna) que decidiese qué técnicas y tratamientos decidía aplicar al caso.... salvo por la noche. Ahhh; por la noche resultaba que lo que hacías 'atropelladamente' durante el día era 'absolutamente lógico' que lo tuviesemos hecho.
-¿Cómo es que aún no le habeis hecho el ECG a este paciente que tiene un dolor torácico?
-Porque ayer por la mañana dijiste que 'ni un electro' sin tu indicación.
-Eso fué por la mañana, ahora es de noche.

Podeis pensar que era un caso puntual en un centro puntual (o no, ahí teneis el espacio para comentar) pero no, cuando mi compañera entró a trabajar en otro servicio de urgencias de otro hospital de similares características se encontró con una amplia minoría de médicos que vivian la misma disociación dia-noche incluso traladada a los horarios post-prandiales de los días festivos... y otr@s compañeros me han comentado cosas similares.

Parece, aún así, algo limitado a los servicios de urgencia, de la atención continuada... ¿Seguro? y en las unidades de hospitalización en las que durante el día te dicen "tú primero me llamas y luego ya iré diciendote qué hacer..." las mimas personas que en otros horarios te dicen "¿y para eso me llamas? debiste ponerle XXX y ya mañana te lo firmaba".

Y en vista de lo que se relata en el blog "The anesthesia dilemma" el tema no se restringe a nuestro pais y a la enfermería "de base"
He trabajado en centros desde hace muchos años y he visto de primera mano la realidad de las prácticas, cómo las Enfermeras de Práctica avanzada en anestesia se consideran practicantes inferiores hasta la tarde y la noche, donde de repente se convierte en lo suficientemente inteligente como para administrar la anestesia para los casos de traumatismo grave, casos difíciles de obstetricia y prestar asistencia en la sala de emergencias y unidades de cuidados intensivos.
  En fin, yo me quedo con quienes entienden de roles y capacidades, de confianza mútua y de apoyo SIEMPRE con el fin de prestar a los usuarios no sólo la mejor atención a nivel individual sino creando un sistema sanitario lo más eficaz y eficiente posible; dando más y mejor atención con los recursos disponibles.

Se acabó la dispersión, llegó la FDA y mandó...

...Regular.

Ya hace año y medio me preguntaba si las aplicaciones sanitarias necesitaban una regulación administrativa y no simples sellos de 'autoacreditación' truco de malabares que la industria tiene bien aprendida con el que intenta acelerar la "entrada en el mercado" de sus productos.

Los americanos son conscientes del delicado equilibrio que deben tener entre el desarrollo de una industria estratégica para el país y la necesaria garantía de fiabilidad técnica y de seguridad y privacidad de los datos de unos dispositivos que más pronto que tarde van a formar parte de la vida cotidiana de una sociedad inmersa en un proceso de "empoderado de la enfermedad"... en vez de "empoderar la salud", pero ese es otro tema.

Así pues hace un mes y medio la FDA publicó un anuncio clarificando las caracteristicas de las aplicaciones que serán reguladas:
A. Las que se utilizan como un accesorio para dispositivos médicos ya regulados por la FDA (por ejemplo, una aplicación que permite a un profesional de la salud para hacer un diagnóstico específico mediante la visualización de una imagen médica de un sistema de archivo y comunicación (PACS) en un teléfono inteligente o una tableta).
B. Las que transforman un dispositivo móvil de comunicaciones en un producto sanitario regulado mediante el uso de los accesorios, sensores u otros dispositivos (por ejemplo, una aplicación que convierte un teléfono inteligente en una máquina de ECG para detectar ritmos anormales del corazón o determinar si un paciente está sufriendo un ataque al corazón).
Desde ese momento está abierto el proceso de consulta sobre el borrador de la regulación un proceso de cuyo resultado dependerá el futuro desarrollo de este potentísimo sector y su futura contribución a los cuidados de salud

En un entorno como el nuestro de sanidad mayoritariamente pública pero "repartida" entre 17 proveedores diferentes (las recientes ofuscasiones respecto a la prestación farmaceutica son la punta del iceberg) el conocimiento de las aplicaciones de monitorización remota que, no tardando mucho, se pondrán en marcha formará parte de las habilidades necesarias de las enfermeras y tanto participar en el diseño de las mismas como en su proceso de regulación y selección para la administración puede parecer algo lejano; pero creedme, ahí hay un nicho de trabajo para las nuevas generaciones de enfermeras que se están formando mientras esperan consguir un empleo estable "en lo suyo". Otra punto de interés es la necesaria formación sobre el uso de las aplicaciones por los pacientes (la formación de formadores) y explotación de los datos por los profesionales algo que, si las administraciones son previsoras irá incluído en los contratos de concesión de uso de la aplicación pero que alguien deberá impartila; ¿porqué no una enfermera?.

Mirando... el nombre

A propósito de la iniciativa "Mírame a los ojos" de los amigos de cuidando y de la visión holística que ha aportado Manoli Domingo ha venido a mi memoria parte del debate de un artículo cuya lectura crítica se ha publicado (doi:10.1016/j.enfcli.2011.07.006) poco después de salir este post (PDF).
 El caso es que en estos días de vuelta de vacaciones much@s os rencontrareis con vuestra unidad tras un período de ausencia más prolongado de lo habitual y, por ello, los pacientes serán "nuevos" (o no, que por eso se insiste tanto en el tema de la cronicidad).
A tod@s nos ha pasado en alguna ocasión un caso de confusión de identidad de un paciente; no en vano es un tipo de error que se repite en todos los ámbitos y en los principales escenarios de eventos adversos estudiados: en la administración de medicamentos, en la realización de pruebas, en la asignación de muestras y resultados... en la entrevista clínica.
 Así que vas con tu carro, con tu lista de trabajo, con tu parte quirúrgico y te acercas a ese primer paciente "nuevo" le miras a los ojos (en 5" eres capaz de saber más de su mirada que de sus palabras), le das los buenos días y... le identificas.
Pero ¿cómo lo hacemos?, ¿cuales son las palabras exactas?, ¿es igual una pregunta que otra?
 La cuestión no es baladí; dejar la pregunta lo más abierta posible "¿cómo se llama usted?" debería forzar una respuesta más completa no exenta de posibilidades de error por nuestra parte (José Pérez Pérez es un nombre común por no hablar de los entornos con un único apellido) que, además, nos permite valorar otros aspectos de la comunicación del paciente.
Mientras que una pregunta cerrada "¿es usted José Pérez Pérez ?" nos obstruye la posibilidad de esas otras valoraciones y, a cambio de unos 3 segundos más de tiempo nos lleva a la trampa de un "SI" como acto reflejo de una confusión posible fruto de muchas circunstancias.
 Repasad en vuestro historial cuantas veces un paciente os ha dado ese tipo de respuesta 'refleja' que os ha podido llevar a una confusión y tendréis un motivo para rearmar vuestro particular cuestionario de la entrevista clínica o de los pasos de identificación de un paciente de modo que mejoréis las posibilidades de detectar un error.
 De la utilidad de los dispositivos de identificación hablaremos en otra ocasión.

Lembranza non desexada

Remataron as vacacions e un xa sabe que a volta dunha desconexión sempre trae consigo unha fase na que se van recibindo novas sobre o acontecido nas datas de ocio e que non todas van ser novas agradables; nin que as malas novas por esperables fosen menos malas. Veño de enterarme do pasamento dunha antiga compañeira tras un longo proceso e asaltanme as imaxes e a lembranza. No furacán dunha experiencia única como foi a apertura dun novo hospital baixo un modelo de xestión incognito para nós coincidimos varios recén diplomados na EUE Compostelana de duas ou tres promocions diferentes. Coñecido é que na formación de grupos de xente nova sempre hai individuos que destacan porque saben desenvolverse mellor e trabar relacions con mais facilidade. Ela era así; unha persoa aberta e, como veu a demostrar dempois, sen medo. Tiña un tipo de personalidade que impedía que pasase desapercibida; ou te atraia ou era branco de agrias críticas. Sempre conversadora e directa o papel que lle tocou desempeñar o desenrolou con normalidade e soltura nun entorno que por novidoso poderíamos considerar hostil. Cando as circunstancias trocaron e pasou a traballar noutra área non se enrrugou mostrando a forza do seu caracter e o bó facer que quenes a coñeciamos sabíamos que tiña. Sempre que voltei por alí e a topei me facía sentir un aprezo especial compartindo 'mesa e mantel' en mais dunha ocasión. Sacou a súa garra de loitadora dende o principio e en ningún intre se laiou ou deu por derrotada; tanto era así que tras falar con ela non sabía un ben en que estado se atopaba ou si era ela quen o animaba a un e non ó contrario. Descansa en paz Nida.

Manifiesto de La Fresneda

Quiero explicar mi tardanza en manifestarme respecto a esta tristísima situación más allá de mis problemas de tiempo personales en mi incredulidad ante lo que intuía. Hasta que no he leído las noticias y entradas relacionadas con ello no me lo he acabado de creer.

Defender lo indefendible pero aparentar que se defiende el servicio público "de calidad"; esa parece ser la consigna de algunos a los que no basta con tener a la gente 21 horas haciendo cola para participar en una infrabolsa de empleo sino que, por lo que se ve, les molesta cualquier iniciativa que saque a la sanidad pública de su falta de acción respecto al cambio de comportamiento de los ciudadanos para con su salud.

Me adhiero al "Manifiesto de La Fresneda" y espero que mucha más gente lo haga y que ese tipo de iniciativas se mantenga donde las hubiese (que seguro que las hay en más sitios) y que se extienda a otros... no es lógico que instalaciones que nos cuesta dinero de nuestros impuestos construirlas, financiarlas y mantenerlas sólo se aprovechen un porcentaje tan pequeño del tiempo.


De efímero a persistente

El pasado día 19 la gente de Cuidando.es lanzó la idea de twittear sus entradas más notables bajo el hashtag #rememberpost como un modo de reivindicar la incipiente "producción bibliográfica" de los blogs de enfermería en España. Al día siguiente algunos de vosotros recibisteis un DM que decía así: 


Y si hacemos  de las entradas de otros? 

Luego las cosas se me fueron liando y no pude concretar más, pero si que fue cundiendo la idea y el hashtag tiene "vidilla". Como seguía muy liado dejé un comentario en la entrada original amenazando con este mail.

Bien; se trata de "poner en valor" entradas de blogs y de que ese valor pase de lo efímero e instantáneo a algo con más persistencia temporal que pueda ser encontrado por quien busque bibliografía sobre un tema de enfermería. Entonces el hashtag se nos queda corto y necesitamos algo como un "banco" de entradas y ya de puestos a ello una manera de clasificarlas por palabras clave (con su tesauro correspondiente que NO hay que inventarse)... vamos, que dándole vueltas ¿porqué no crear una página de citas bibliográficas de entradas de blogs de enfermería?

El problema está, claro, no tanto en gestionar un espacio así (un google site podría bastar) como generar las citas concretas en formato reconocible por los buscadores. En fin, que la idea es pero que muy interesante, pero quedan demasiadas cosas 'serias' por definir para llegar a buen puerto... o es posible que alguien ya lo esté haciendo y yo, en mi ignorancia supina, no lo sepa?

Otra alternativa 'latente' sería una especie de menéame de entradas de blogs de enfermería en el que más allá de una 'seria' cita bibliográfica se pudiese aquilatar la difusión de una entrada concreta (etiquetada según su temática) mediante el conocido sistema de votación de dicha web.

Bueno; mientras todo esto cristaliza creo que continuar con el hashtag es una buena forma de dar a conocer entre la creciente población enfermera de la red esas entradas de "hace tiempo" que tienen mucho que aportar.

La soledad del momento del NO

Ya comenté alguna vez por ahí que un gerente que tuve* decía que a lo que más temía un administrador sanitario era a los que "empuñaban el boli" porque ellos son los verdaderos decisores del gasto. Sin entrar a desentrañar semejante media verdad y curándome en salud os recuerdo que si bien las playas están hechas de granos de arena, en nuestra playa alguna arena proviene de rocas que alguien decidió exponer al embate del mar. Y ello por no hablar de programas de publicidad de todo tipo o programas de "prevención de salud" que de eso ya trata la página del sistema epidemiológico de vigilancia de alertas de chorradas medicalizadoras.

Lo cierto es que todos los días y en casi todas las situaciones los profesionales sanitarios actúan con mayor o menor conciencia como decisores de gasto y lo innegable es que la llamada "sostenibilidad" del sistema sanitario tiene uno de sus focos de combate en estas microdecisiones señalando acusadoramente a los profesionales sin ofrecer el apoyo suficiente tanto normativo como institucional en los puntuales momentos en los que se les pide que digan que NO.

Ejemplos hay a miles pues, como expliqué, son decisiones que se toman a diario y en muy diversas circunstancias, pero con una característica común a mi modo de ver: La soledad.

Llega el momento de explicar las opciones que tiene el paciente, de dar recomendaciones, de indicar/prescribir... llega el momento de NO hacer el volante, la receta, el papel que sea y allí está el profesional con el paciente (con o sin acompañante) tratando de rodear la cuestión, buscando argumentos o quejándose de lo que 'no me dejan hacer', razonando, discutiendo (o no) afligiéndose con el usuario o indignándose por su insolidaridad, buscando alternativas, luchando...

Decir que NO para evitar no se sabe qué para no se sabe cuando en un momento en el que se puede decir que SI y evitar conflictos instantáneos... eso es lo que requiere de los profesionales responsables con su sistema.

Visualizar, en cifras, las consecuencias de las decisiones pasadas no ayuda mucho y obliga a un tedioso esfuerzo administrativo; proyectar al futuro las cifras de tal o cual decisión tomada sistemáticamente (por ejemplo poner ambulancia a todas las altas) puede resultar llamativo pero no ofrece argumentos para ese "momento de soledad".

No, no hago esta entrada para exponer ninguna genial idea que resuelva esta vieja cuestión, sólo que me he acordado de cómo de lejos están unos escritorios de otros... semánticamente tiene su aquel;  a uno le llaman despacho y a otro consulta.

Por cierto, que en este tema la enfermería se encuentre embarcada al mismo nivel de importancia (cualitativamente todas las negativas valen lo mismo) no deja de ser indicativo del "nivel de prescriptor" que tenemos aunque este no se encuentre reconocido (suficientemente) otra cosa es que much@s de los que reivindican la prescripción enfermera olvidan esta faceta de la responsabilidad.

*Una persona a la que no le gusta nada que se le recuerde lo que decía... de hecho me bloqueó en twitter porque le recordé que el también decía que "la estadística (usada sin rigor) es el arte de manipular los datos para que digan lo que quieres".

Pesimismo o optimismo respecto al checklist?


Acabo de twittear el primer avance de resultados (PDF) de la encuesta realizada por la agencia de seguridad del paciente británica dentro de su campaña "Patient Safety First" y no deja de alarmarme pensar que el "efecto sodoku" está más extendido de lo que creemos.

Aunque únicamente un 11% de los encuestados ha completado el formulario (una muestra de 98 individuos, un tercio anestesistas -Apenas 8 enfermer@s-) de estos el 83% (N=81) ha señalado el listado de comprobación como "un ejercicio de completar casillas y no como una herramienta de mejora de la comunicación".

Esto es un problema grave, muestra claramente lo que hemos venido comentando y es que la implantación 'a machete' (como demuestra el 72% de respuestas que indica que el checklist se hace en el 100% de los casos) no garantiza que ocurra un verdadero cambio cultural que sustente el uso inteligente de cualquier mejora en el ámbito de la seguridad.

Me llama poderosamente la atención que una cuarta parte de los encuestados manifieste que, además de los 3 tiempos de la lista de comprobación, se realizan reuniones de equipo pre y post intervención. Dado que se trata de datos "por individuos" y no "por centros" o "tipo de centro" no se puede deducir cuan extendida está esta práctica o si únicamente se aplica en cirugías más complejas.

Tendencias:

Si los resultados "cuantitativos" sustentan cierta preocupación; creo, a mi humilde entender que las respuestas a las cuestiones abiertas delinean un trasfondo de optimismo.

Se reconoce que la implicación de cirujanos y anestesistas con la realización de "la parada" está mejorando, se señalan oportunidades de mejora como la adaptación al entorno del paritorio, la realización de audits y grupos de focales de mejora; también realidades: Lo complejo de implementar su práctica en "los tiempos" quirúrgicos y, como no, peligros: Demasiada orientación a la cirugía general, Modelos específicos implantados sin adaptar a los centros, renuencia por parte de algún grupo de profesionales, planes de implantación mal realizados, tendencia a una rutina de realización incorrecta pasando de una mecánica de "coordinador pregunta- profesional responde" a una "autocumplimentación".

Creo que hay que seguir implicandose en confección de una herramienta que resulte útil, compartiendo tod@s un punto de vista común respecto a qué se quiere conseguir con su introducción, confeccionando guias claras de qué significa cada respuesta y porqué se introduce cada pregunta en el listado, realizando seminarios o talleres para aclarar dudas y 'captar' problemas... hay que seguir trabajando sin creer que 'soltar' un papel se suficiente.

Cargos y políticas

Propuese esta multientrada colectiva tras una mañana algo revuelta en twitter por un comunicado de un consejo de cotizantes que llamaba la atención sobre la ausencia de cargos "enfermeras" en los altos puestos de la administración de su comunidad. Como cada uno tenemos una visión del tema pues creo que es una buena herramienta de reflexión colectiva.

Dije en un tweet que no vale de nada una DG de cuidados (dirigida por una enfemera) si no hay políticas que entiendan que los procesos de salud ya no son "procesos médicos". Ese cambio de visión no implica únicamente dar un papel a la enfermería sino una forma de hacer sanidad centrandola en el paciente, otorgandole un peso en la toma de decisiones respecto a su salud y entendiendo donde está la mayor parte del gasto (y por ende la capacidad de ahorro) de un modo global, esto es, visión de 1 sistema (no 2: AP y AE) para 1 paciente (no cachitos de paciente).


Yo prefiero políticas que entiendan el potencial de mi profesión en la atención a ciertos procesos; su valor añadido científicamente demostrado y su capacidad de trabajo en equipo.

¿Que la profesión está escasamente representada a nivel político? Eso importará a los profesionales que tengan ese tipo de aspiraciones; yo prefiero que dentro de las administraciones existan foros de debate y canales de comunicación que permitan alzar la mano, pedir la palabra y decir "¿Y porqué eso no lo hace una enfermera en vez de estar rellenando recetas para otro?" (es un ejemplo, nada más).

¿Que esa falta de representación imposibilita la aplicación de esas politicas? hombre, las enfermeras somos importantes, pero la generación de ese cambio en la sanidad no depende únicamente de nosotras; sin los demás agentes y sin un cambio "filosofico" de a quien y como prestamos servicio no habrá reenfoque organizacional que valga.

Yo sé de una comunidad en la que ejerció de Vicepresidente uno que era enfermer@... sinceramente, creo que se notó muy poco.

He hecho este post via mail porque blogger tiene bloqueado el modo 'redactar' y no me deja cambiarlo a modo 'edición html' a ver si así puedo publicarlo.

El provincianismo en tiempos de grado

El pasado 13/6 recibí un sms desde "Enferm Leon" que decía:
La Univ. Leon y el Consejo CyL emprenderán acciones legales ante las acusaciones de la Universidad de Valladolid sobre curso Grado
Con un enlace a la noticia en ileon... que en su momento renuncié a comentar pero a la que ahora a la vista de la información que sobre el tema expone el colegio de Badajoz (reconocido no neutral en este y otros temas) quería hacer unas puntualizaciones.

Toda vez que en dicho medio ya no se pueden incluir comentarios aprovecho mi espacio personal para dejar constancia.
La legalidad de los temas las deciden querramos o no los tribunales...pero más allá de estas guerrillas provincianas entre universidades, colegios de cotizantes y consejo autonómico creo que hay otros temas de fondo más relevantes.
Las enfermeras ya somos mayorcitas para hacer cada una lo que consideremos oportuno con nuestro dinero si; pero no para someternos a engaños o cuasiengaños. Yo personalmente considero que no hay necesidad ninguna de "nivelarse" sino que hay necesidad perentoria de mantenerse actualizado.
Esto es lo que se publica en la página del colegio de Badajoz sobre este 'curso de nivelación':
"se reconocen asignaturas de contenido teórico, por experiencia profesional, que correspondería a un prácticum, cuando en la memoria tampoco está descrito que se reconocerán materias/asignaturas por experiencia profesional. Así se constata que la Comisión Docente del curso de adaptación al Grado de Enfermería de la Universidad de León, en sesión celebrada el 9 de Diciembre de 2010, acordó, en relación a la solicitud de reconocimiento de créditos, RECONOCER 18 créditos como EXPERIENCIA PROFESIONAL (cinco primeras materias indicadas anteriormente)···
Total···Que de esos 30 ECTS sólo se imparten 6 ECTS, dirigidos a lo que se vienen en llamar "prescripción enfermera"."
No encuentro fundamento a la necesidad de "graduarme" para mantener o avanzar profesionalmente, como no encuentro necesidad de "graduarme" para avanzar academicamente realizando cursos de postgrado (Master y Doctorado) creo que este juego de intereses le hace escaso favor a una profesión que debe luchar por un avance competencial verdadero.
Posiblemente exista más de una partida de ajedrez en este tablero de intereses; dentro de las universidades, entre las universidades, dentro de los consejos de cotizantes y entre los colegios provinciales de cotizantes ... con satélites en el resto de la industria formativa y cada uno podrá argumentar que hacer esta nivelación es conveniente o no o que el modo de hacerla es conveniente o no.
Como cada universidad podrá argumentar que exija o no un título específico para el acceso a los cursos de postgrado; otra cosa es cómo pretendan argumentar el rechazo al título de Diplomado en enfermería para dicho acceso así como el modo en el que argumenten su rechazo a convalidar créditos de títulos de máster anteriores... sabemos que hay crisis y que a las universidades les espera una durísima reestructuración por razones demográficas naturales y por razones económicas... poco más que explicar.

Me gustaría que se pudiesen rechazar los argumentos arriba expuestos pero como esto no lo lee ni el pupas pues me quedaré con la duda.