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De extraordinaria a excepcional y cobro porque me toca

Una cosa tengo clara: en nuestro medio la desverguenza de los que participan en algún ámbito de decisión es proporcional a la mansedumbre de l@s afectad@s.

En lo que respecta a la contratación de empleados públicos las administraciones aquí nos ofrecen una irregular muestra de una legislación fuerte desde un prisma de la seguridad del empleo, pero con muchos fallos en lo que respecta a la determinación y cobretura de plantillas orgánicas... de ahí y del jugoso negocio que para la parte social significa el elevado número de profesionales sin empleo fijo surgió el esperpento del alto porcentaje de personal interino, eventual, temporal, "acumulado" y tantas otras formas de pseudocontratación que los malabaristas han puesto en escena en estas décadas.

Pero en Septiembre de 2016 el Tribunal de Justicia de la Unión europea (TJUE) soltó una bomba no intencionada sobre tanta precariedad e ignominia... la sentencia del caso Diego Torres que reconoce el derecho de los interinos a indemnización al cesar de sus contratos y equipara (por si no estuviera claro) los derechos de los trabajadores eventuales a los fijos pareció no mover nada... en principio, pero cuando los juzgados españoles empezaron a aplicarla no quedó más remedio que "mover carta"... o que lo pareciera.

Así que en el cenáculo de las decisiones se pergueñó la idea de acompasar la conversión de los interinos a fijos mediante oposiciones "en diferido" de forma que "que parezca una oposición" pero eso si; en 2019 que así vemos qué pasa con lo que está pensando ahora el TJUE y mientras ponemos a esta gente a pagar cursos...

Porque Teniendo una OPE que se puede suspender a una semana de su celebración y devolver el dinero a quien lo pide y muchos meses despues (o ni suspenderla y devolver el dinero 10 años después sólo a quienes lo reclaman judicialmente) ¿para qué usar el sistema de concurso (o el de concurso abierto y permanente) para profesiones "del conocimiento" cuya capacidad apenas se puede ver reflejada en un examen y mucho menos en uno tipo test? ni que se tratara de "estabilizar" a esa gente.

¿A nadie se le ha ocurrido que puede ser ilegal y que es ilegítimo que quienes forman parte del tribunal de una oposición hagan formación para la misma?¿Nadie ve ahí una concurrencia de intereses?

La escandalosa experiencia de la "Santa OPE extraordinaria" no parece haber servido de nada...

Entre la mágica atracción y el arabesco grotesco

Constantemente surge entre much@s enfermer@s algún comentario sobre la falta de autonomía profesional referido a no poder realizar tal o cual técnica de igual modo que se menciona como una práctica avanzada el poder realizar esta o aquella técnica.

La realización de técnicas más o menos complejas ejerce en tod@s una especie de atracción mágica; irresistible de forma que muchos echan de menos los tiempos pretéritos en los que aquellos "Ayudantes técnicos sanitarios" o los "prácticantes" realizaban (por costumbre y asentimiento) técnicas que ahora realizan médicos especialistas.

Entre estas personas algunas han desarrollado una sensibilidad especial frente al corpus de conocimientos propio de la profesión de enfermería, sensibilidad que se vuelve casi "salpullido" si se menciona alguna de las codificaciones desarrolladas para tratar de unificar el lenguaje de ese conocimiento propio siendo especialmente relevante la reacción que les produce cualquier mención a Nanda-Nic-Noc (NNN); código "entronizado" como oficial vía BOE.

Carlos Tardío Cordón es enfermero y abogado a la sazón presidente del colegio de enfermería de Badajoz durante años simbolizó la lucha por la transparencia y la legalidad en el Consejo General de Enfermería en el que casi era la única oposición efectiva y por ello hay que estarle agradecidos pero ello no quita que mantengamos múltiples discrepancias con él y esta es una de ellas.

https://www.facebook.com/enfer.evidente/posts/1631144693591281En una reciente conversación en Facebook a raiz de un post sobre el uso de NNN en urgencias Carlos volvió a hacer gala de
su opinión al respecto de la terminología.

Lo que me gustaría precisar es que dicha oposición, al igual que la de algunos médicos, psquiatras y psicólogos respecto a los códigos (CIE-10 y DSM-5) que el mismo BOE entroniza como oficiales para sus profesiones no refleja, en realidad, un rechazo a un corpus propio de conocimiento y por ende a la necesidad de un cuerpo de investigador@s y académic@s que lo fundamenten y lo hagan progresar para estar con los tiempos y los conocimientos.

Es cierto que la codificación y su necesario fundamento teórico se parecen en ocasiones a aquel "juego de abalorios" que narró Hesse pero confundir la repulsa por la torpeza del código, por su enrevesado arabesco con la falta de validez del corpus propio de conocimientos es un error garrafal.

Así pues debemos tratar de conservar el equilibrio entre la natural atracción por la realización de las técnicas y nuestro corpus de conocimiento propio unica marca que nos separa de verdad de ser meros técnicos.